El pan mojado
EL PAN
MOJADO
Lectura bíblica:
Juan 13:21-30
“Habiendo dicho
Jesús esto, se conmovió en espíritu, y declaró y dijo: De cierto, de cierto os
digo, que uno de vosotros me va a entregar. Entonces los discípulos se miraban
unos a otros dudando de quien hablaba. Y uno de sus discípulos, al cual Jesús
amaba, estaba recostado al lado de Jesús. A éste, pues, hizo señas Simón Pedro,
para que preguntase quién era aquel de quien hablaba. Él entonces, recostado
cerca del pecho de Jesús, le dijo: Señor, ¿Quién es? Respondió Jesús: A quien
yo diere el pan mojado aquel es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote
hijo de Simón. Y después del bocado, Satanás entró en él. Entonces Jesús le
dijo: lo que vas a hacer, hazlo más pronto. Pero ninguno de los que estaban en
la mesa entendió por qué le dijo esto. Porque algunos pensaban, puesto que
Judas tenía la bolsa, que Jesús le decía: compra lo que necesitamos para la
fiesta; o que diese a los pobres. Cuando él, pues, hubo tomado el bocado, luego
salió; y era ya de noche.”
Esta es una de las
narraciones que realmente causan impacto para muchos, ya que es el momento en
que Jesús declara abiertamente que va a ser entregado. Prácticamente estaba en
sus últimos días. Pero lo que más nos debiera llamar la atención es la esencia
amorosa y perdonadora de Jesús ante Judas. En estos versos existe una costumbre
judía que nos dejará perplejos al momento de entenderla. EL PAN MOJADO
A quien yo diere el
pan mojado aquel es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote hijo de Simón
Pan mojado: El dueño de casa,
cada vez que tenía un huésped o invitado en su hogar, les servía sopa con pan y
el dueño de casa tomaba con su mano el pan, lo untaba en la sopa y con su
propia mano le daba de comer al huésped. Con esto el dueño de casa le daba a
entender que lo respetaba, lo apreciaba, un acto sublime e humilde del dueño de
hogar.
Si nos damos cuenta
Jesús a pesar de saber que Judas lo iba
a entregar, le estaba dando a entender con este acto de mojar el pan y
darle con su propia mano de comer que lo amaba, lo respetaba y lo apreciaba
como amigo.
Mateo 26:47-50
“Mientras todavía
hablaba, vino Judas, uno de los doce y con el mucha gente con espadas y palos,
de parte de los principales sacerdotes y de los ancianos del pueblo. Y el que
le entregaba les había dado señal, diciendo: al que yo besare, éste es;
prendedle. Y en seguida se acercó a Jesús y dijo: ¡salve Maestro! Y le beso. Y Jesús le dijo: Amigo, ¿a qué vienes? Entonces
se acercaron y echaron mano a Jesús y le prendieron.”
Sal 55:12-14
“Porque no me
afrentó un enemigo, lo cual habría soportado; ni se alzó contra mí el que me
aborrecía, porque me hubiera ocultado de él; sino tú, hombre, al parecer intimo
mío, mi guía y mi familiar; que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, y
andábamos en amistad en la casa de Dios.”
Dios sabe cuando
nosotros vamos a pecar, el conoce todos nuestros pasos, lo deja plasmado en los
salmos David.
Sal 139:1-4
“Oh Jehová, tú me
has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has
entendido desde lejos mis pensamientos, has escudriñado mi andar y mi reposo. Y
todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua, y
he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.”
Imaginemos a Dios
cuando vamos camino a pecar diciendo: Hijo… yo te amo, te respeto, te anhelo,
te considero mi amigo… Pablo con estas palabras nos deja claro cuál es el amor
de Dios para nosotros los pecadores.
Ro 5:8
“Mas Dios muestra
su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por
nosotros.”
Efe 3:17-19
“Para que habite
Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados
en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea
la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de
Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la
plenitud de Dios.”
En la historia del
Joven rico, Jesús actúa de la misma forma que con Judas. El joven rico era
perfecto quizás para muchos, Jesús lo miró y lo amo y no por su obediencia;
porque al momento de mirar al joven rico se da cuenta que le faltaba algo…
estaba amando más a las riquezas que a Dios. Aún en esa condición Jesús lo amó.
Marcos 10:17-22
“Al salir él para seguir
su camino vino uno corriendo, e hincando la rodilla delante de él, le pregunto:
Maestro bueno, ¿Qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le dijo: ¿Por qué
me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino solo uno, Dios. Los mandamientos
sabes: no adulterarás, no mates, no hurtes, no digas falso testimonio, no
defraudes, honra a tu padre y a tu madre. El entonces, respondiendo, le dijo:
Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud. Entonces Jesús, mirándole,
le amó, y le dijo: una cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes y dalo a
los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz. Pero
él afligido por esta palabra, se fue triste porque tenía muchas posesiones.”
El amor de Dios
aunque lo queramos entender no lo vamos a lograr. Dios nos ama a pesar de
nuestros pecados.
Oseas
3:1 Me dijo otra vez Jehová: Ve, ama a una
mujer amada de su compañero, aunque adúltera, como el amor de Jehová para con
los hijos de Israel, los cuales miran a dioses ajenos, y aman tortas de pasas.
Dios cuando pecamos
el se duele, porque el quiere que nosotros seamos santos como el es santo.
1 Pedro
1:16 porque escrito
está: Sed santos, porque yo soy santo.Uno de los propósitos de los cuales vino
Jesus a la tierra era para entender la vida y tentación del hombre.
Jesús conocia la
vida del hombre, el sabe que la naturaleza del hombre es debil.
He 4:14-16
4:14 Por tanto,
teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios,
retengamos nuestra profesión. 4:15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no
pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo
según nuestra semejanza, pero sin pecado. 4:16 Acerquémonos, pues,
confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia
para el oportuno socorro.
Juan conocía esto,
por eso manifiesta el amor de Dios en estos versos.
1 jn 1:9-10
1:9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel
y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. 1:10 Si
decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en
nosotros.
Pero no debemos dar
lugar al diablo como le sucedió a Judas
Efe
4:27 ni deis lugar
al diablo
No darle lugar al
diablo…
Judas cuando debía
estar escuchando la voz de Jesús estaba lejos escuchando las voz de los
sacerdotes y ancianos.
Lc
22:1 Estaba cerca
la fiesta de los panes sin levadura, que se llama la pascua. 22:2 Y los
principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo matarle; porque temían al
pueblo. 22:3 Y entró Satanás en Judas, por sobrenombre Iscariote, el cual era
uno del número de los doce; 22:4 y éste fue y habló con los principales
sacerdotes, y con los jefes de la guardia, de cómo se lo entregaría. 22:5 Ellos
se alegraron, y convinieron en darle dinero. 22:6 Y él se comprometió, y
buscaba una oportunidad para entregárselo a espaldas del pueblo.
Nota: Todo el contenido de esta pagina es obra del Espíritu Santo. Nosotros solo somos administradores de su gracia.
2 Pe
1:21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.