El poder de la palabra de Dios


He 11:3
“Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.”

Nuestra naturaleza no logra dimensionar el poder de Dios, o el poder de la palabra de Dios. El escritor de Hebreos, nos aclara que el universo fue creado solo a través de la palabra de Dios, lo que nos trata de decir, es que Dios en su soberanía ordeno que el mundo fuese y se hizo. No fue una construcción a pulso.

Moisés nos da más detalles sobre el poder de la palabra de Dios, una palabra que tiene el poder de crear, restaurar y ordenar.

Gen 1:1,3
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y dijo Dios: sea la luz; y fue la luz.”

Salmos 119:91
“Por tu ordenación subsisten todas las cosas hasta hoy, pues todas ellas te sirven.”

Como entendemos que una sola palabra pueda lograr alcanzar tal efectividad, a tal punto que podemos decir hoy en día, que su palabra sustenta a este mundo en el cual habitamos.

He 1:3
“El cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder…”

La palabra de Dios no queda obsoleta en estos tiempos, los hombres hemos olvidado que en la palabra de Dios hay poder, y que permanece para que nos cobijemos en ella.

1 Pe 1:25
“Mas la palabra del Señor permanece para siempre…”

La palabra dicha por Dios tiene tal poder que puede superar lo natural y lógico para el hombre. Jesús realiza un milagro solo con decir una sola palabra.

Lc 5:4-6
“Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: Boga más adentro, y echad vuestras redes para pescar. Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red. Y habiéndolo hecho, encerraron gran cantidad de peces, y su red se rompía.”

Poder para suplir las necesidades del hombre. No podemos quietarle la efectividad a la palabra de Dios, no podemos tratar de adulterarla, el que adultera la palabra de Dios no está conforme con el poder que Dios da al hombre.  

2 co 4:2
“Antes bien renunciando a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios.”

1 Tm 6:3-5
“si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabra de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad. Esta envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimientos y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales.”

La palabra de Dios tiene el poder para sanar la vida de las personas, sin ni siquiera poner las manos sobre el enfermo.

Mt 8:8
“Respondiendo el Centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo ni techo; solamente di la palabra y mi criado sanará.”

Salmos 107:20
“Envió su palabra, y los sanó, y los libró de su ruina.”

Poder para juzgar nuestros corazones.

He 4:12
“porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del  corazón.” 

Poder para santificarnos.

Efe 5:25,26
“…así como Cristo amó a la iglesia y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra.”

Jesús dijo:

Juan 15:3
“Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.”

Poder para luchar contra Satanás.

Ap. 19:13-15
“Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS. y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira de Dios Todopoderoso.”

Efe 6:17
“y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios.”

Conclusión

Je 23:29

“¿no es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra.”

Nota: Todo el contenido de esta pagina es obra del Espíritu Santo. Nosotros solo somos administradores de su gracia. 

2 Pe 
1:21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.



Para mayor información: dario.molina.c@gmail.com 


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