La Palabra nos da vida
La Palabra nos da vida
Lectura Bíblica: 1 Timoteo
4:16 Ten cuidado de ti mismo y de
la doctrina (enseñanza); persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti
mismo y a los que te oyeren.
La vida perfecta no consiste en
el libertinaje como muchos hoy en día profesan sin temor a las consecuencias;
esta consiste en seguir paso a paso las
reglas que Dios ha dejado al hombre para que vivan a través de ella.
Juan
5:39 Escudriñad las Escrituras;
porque a vosotros os parece que en ellas
tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Es evidente que no seguir las
reglas consistente para terminar bien, nos llevará a un claro y rotundo
fracaso. Un caso que ratifica esto, lo experimento David, subestimó las reglas de Dios y actuó
conforme a lo que él pensaba estaba correcto hacer.
1 de Crónicas
13:6 Y subió David con todo
Israel a Baala de Quiriat-jearim, que está en Judá, para pasar de allí el arca
de Jehová Dios, que mora entre los querubines, sobre la cual su nombre es
invocado. 13:7 Y llevaron el arca de Dios de la casa de Abinadab en un carro
nuevo; y Uza y Ahío guiaban el carro. 13:8 Y David y todo Israel se regocijaban
delante de Dios con todas sus fuerzas, con cánticos, arpas, salterios,
tamboriles, címbalos y trompetas. 13:9 Pero cuando llegaron a la era de Quidón,
Uza extendió su mano al arca para sostenerla, porque los bueyes tropezaban.
13:10 Y el furor de Jehová se encendió contra Uza, y lo hirió, porque había
extendido su mano al arca; y murió allí
delante de Dios.
En el desarrollo de la acción, no
vemos ningún problema, solo el final nos indicó que algo no se hizo bien. ¿cuál
fue la pieza faltante? Pues, David no
miró la ley de Dios, sino que se
salto las instrucciones para trasladar el arca de Dios, intentando seguir las
suyas. El final fue desastrazo.
1 de Crónicas
15:12 y les dijo: Vosotros que
sois los principales padres de las familias de los levitas, santificaos,
vosotros y vuestros hermanos, y pasad el arca de Jehová Dios de Israel al lugar
que le he preparado; 15:13 pues por no haberlo hecho así vosotros la primera
vez, Jehová nuestro Dios nos quebrantó, por cuanto no le buscamos según su ordenanza.
Lamentablemente David rechazó las
reglas de Dios para llegar a terminar bien; hoy en día la historia se repite en
la humanidad, los mas grandes tropiezos
de nuestra vida, son precisamente porque hemos rechazado las directrices de
Dios y hacemos las cosas conforme nos parecen bien.
1 Pedro
2:6 Por lo cual también contiene
la Escritura: He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida,
preciosa; Y el que creyere en él, no será avergonzado. 2:7 Para vosotros, pues,
los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen, La piedra que los
edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ángulo; 2:8 y: Piedra de
tropiezo, y roca que hace caer, porque
tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también
destinados.
Jesús en su estancia en la tierra
clarifica la vida del hombre que sigue las instrucciones de Dios, y
paralelamente la vida del que no mira la
palabra de Dios para evitar el tropiezo.
Mateo
7:24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le
compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 7:25
Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra
aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 7:26 Pero
cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre
insensato, que edificó su casa sobre la arena; 7:27 y descendió lluvia, y
vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y
cayó, y fue grande su ruina.
Ninguno que comienza a construir
su futuro quiere fracasar en los planes predispuestos; sin duda, lo menos que
tenemos en mente es perder lo invertido en la obra que llevamos con ahínco
edificando. Pero es clave entender que si no seguimos las reglas de Dios, él se alejará de nosotros y nuestra obra
será desprotegida y al mismo tiempo destruida por nuestros enemigos.
Salmos
127:1 Si Jehová no edificare la
casa, En vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En
vano vela la guardia. 127:2 Por demás es que os levantéis de madrugada, y
vayáis tarde a reposar, Y que comáis pan de dolores; Pues que a su amado dará Dios
el sueño.
Seguir las reglas de Dios es
seguridad absoluta, no en vano seremos bendecidos y prosperados cuando le
dediquemos el tiempo para observar lo
que Dios quiere de nosotros.
Jeremías
6:16 Así dijo Jehová: Paraos en
los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen
camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No
andaremos.
Lamentablemente la humanidad
sigue tropezando, la idea de no seguir el camino de Dios nos clarifica la
soberbia de este mismo, nos creemos capaces de evitar el fracaso construyendo
nuestro propio futuro sin mirar la forma
correcta para hacerlo: escuchar a Dios.
Salmos
119:56 Estas bendiciones tuve
Porque guardé tus mandamientos.
119:165 Mucha paz tienen los que
aman tu ley, Y no hay para ellos tropiezo.
Nota: Todo el contenido de esta pagina es obra del Espíritu Santo. Nosotros solo somos administradores de su gracia.
2 Pe
1:21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.